El Parque de María Luisa situado en Sevilla (España), es el jardín
público o parque más famoso de la ciudad y uno de sus pulmones verdes.
Recientemente ha sido declarado Bien de Interés Cultural. En la ciudad se
conserva otros parques históricos como Jardines de las delicias o los Jardines
de Murillo y el Paseo de Catalina de Ribera.
Estos espacios, que en principio formaban parte de los jardines
privados del Palacio de San Telmo, fueron donados en 1893 por la infanta María
Luisa Fernanda de Borbón (duquesa de Montpensier) a la ciudad. Fueron
reformados, por el ingeniero francés Jean-Claude Nicolas Forestier, conservador
del bosque de Boulogne en París, que le dio un toque romántico, inspirado en
los jardines del Generalife, la Alhambra y los Alcázares de Sevilla. En el
parque se abrieron las plazas de España y de América, que constituyen unos de
sus principales atractivos. Se inauguró el 18 de abril de 1914.
Monte Gurugú, también contiene gran variedad de especies avícolas
entre las que se pueden destacar los pavos reales y pájaros cantores, cisnes y
patos que esperan pacientemente a que un paseante les alimente con los granos
que se venden en sus proximidades o el que traiga de su casa (típicamente pan).
Sus fuentes, dan ese toque arabesco que añaden el sonido y la paz
al relax que puede disfrutarse entre sus muchos bancos azulejeados y
detallistas, que describen obras de la literatura y otras artes donde se puede
descansar sosegadamente.
Después de un agradable caminar por sus calles nominadas con
famosos nombres, se llega a la Plaza de América donde se puede disfrutar entrando
en dos de los más famosos museos de la ciudad, el de Artes y Costumbres
Populares y el Arqueológico y sede de la Exposición Iberoamericana de 1929.
Esta Plaza de América tiene una particular característica, sus
palomas, que al agruparse forman una blanca alfombra cuyo apetito resulta
difícil de saciar. Por esta razón al Parque en general también se le conoce por
el sobrenombre de "parque de las palomas".
María Luisa Park, located near the
center of Seville, is the most famous public park or garden in the city and one
of its green lungs. It has been recently declared Asset of Cultural Interest.
This space was part of the private
gardens of the San Telmo Palace, donated to the city in 1893 by the Infanta María
Luisa Fernanda de Borbón, Duchess of Montpensier. It was remodeled by French
engineer Claude Nicolas Forestier, curator of the Bois de Boulogne in Paris,
bringing a Romantic touch to it, inspired by the Generalife, the Alhambra and
the Alcázar of Seville. The Plazas de España and América were opened, being two
of its most important attractions. It was opened on April 18th 1914.
Mount Gurugú is home to various bird
species, among which we can find peacocks and singing birds, swans and ducks,
waiting patiently for anyone to feed them grains sold very close to the pond or
the ones brought from home (mostly bread).
Its fountains give it that nice
arabic touch that brings sound and peace to the relaxing experience that we can
enjoy among its many benches full of tiles and details, depicting literary
pieces and other artworks, serving as resting places.
After enjoying a nice walk along its
paths named after famous personalities, we arrive at the Plaza de América,
where we can enter two of the most famous museums in Seville: the Museum of
Popular Arts and Customs and the Archaeological Museum and 1929 Ibero-American
Exhibition Headquarters.
Plaza de América has a special
feature: the doves. They gather all together and form a white carpet on the
floor, whose apetite is difficult to satisfy. For this reason this place is
better known as the “Doves Park” (Parque de las Palomas).